Una mujer llega a su Ginecóloga y le dice desesperada:
-Doctora, por favor, póngame la T de cobre (un método anticonceptivo).
-¿Para que? Usted es aún muy joven y, además, eso es muy incómodo.
-Es que la necesito: Hace una semana llego el cartero y cuando me di cuenta estábamos…..haciendo el amor en el jardín.
También cuando llega Jorge el jardinero hacemos el amor.
También con Pepe el panadero y con Tomas el lechero y…también tengo sexo a diario con el carnicero, el fontanero, el mecánico, el bombero, el señor de la basura, el esposo de Doña Zoila y…
Mire mijita, cálmese, cálmese… no creo que a usted le convenga la T de cobre?
¿No?
No, mejor póngase la ‘P’ de puta…¡y cobre-le!. ¡Cóbrele a todos!