Una ruidosa, fea y espantosa señora, entra en la tienda con sus dos niños.
Les grita, los insulta y los tironea sin parar.
El encargado de la recepción se dirige a ella:
«Buenos días, señora, y bienvenida a nuestra tienda.
Tiene usted dos hermosos niños, ¿son gemelos? »
La señora deja un momento de gritar para responder al encargado:
Por supuesto que no, gran idiota.
El mayor tiene nueve años y el otro tiene siete. ¿De dónde saca usted que podrían ser gemelos? ¿Usted es ciego, estúpido o güevón?
No, señora, no soy ciego, ni estúpido y menos güevón, responde el encargado.
Simplemente lo que no puedo creer es que a usted con esa cara, esa barriga, y con ese genio tan hijueputa, !alguien se la haya podido comer dos veces!